¿CICLONES MÁS TERREMOTO? SOLO ESO LE FALTARÍA A HAITÍ

Hace dos semanas expresé mi preocupación por el futuro mediato en inmediato de Haití, formulándome un largo rosario de preguntas, que estoy seguro pocos estarían en condiciones de satisfacer mis necesidades de respuestas. Pero me faltó incluir una interrogante que creo será mejor no escuchar a quien intente responder de forma categórica: ¿Qué pasaría si en las precarias condiciones en que se encuentra después del terremoto, la capital haitiana (costera por cierto) es nuevamente golpeada por la temporada ciclónica que se aproxima?

Nadie sabe con exactitud cuántos haitianos están en la intemperie. Cuántos quedaron sin casas. Cuántos murieron. Cuántos quizás son refugiados aun por huracanes implacables que como "Dean" hicieron de las suyas en ese país de infinitas desgracias y tormentos.

Fueron tantos los muertos y daños diversos que dejó a su paso este fenómeno atmosférico, que hasta los registros periodísticos quedaron cortos al momento de contabilizar el balance final. No fue igual que las secuelas del terremoto del pasado 12 de enero, pero suficientemente contundente para un mísero y descompuesto país que no sale de una para entrar en otra calamidad.

Lo que si sabemos todos, es que si la época de huracanes que iniciará en cuatro meses sorprende a Haití con el desastre encima, entonces de poco valdrá seguir haciendo estimaciones o cálculos de cuánto dinero supone reconstruir al vecino país. El tiempo habría que emplearlo entonces en seguir recogiendo muertos y heridos; buscando desaparecidos; vacunando para envitar infecciones colectivas; diligenciando cámaras fotográficas y televisivas para captar el momento de entrega de ayudas, y vigilando de cerca a los expertos en aprovechar confusiones e infortunios ajenos, para robar, saquear, engañar y fingir preocupaciones y solidaridad.

Que Dios nos agarre confesados. A todos, porque de este lado también nos toca...Y bien cerquititita.
OQ